
El hombre que convirtió el cielo de Guayaquil en su casa.
Guayaquil, octubre de 2025.
El cielo porteño fue testigo de una historia de vuelo, perseverancia y amor por el aire. Tras siete días de competencia y un día de prueba, el piloto guayaquileño Raúl Guerra se consagró campeón nacional de parapente Cross Country FAI 2 en el lugar que él mismo descubrió, defendió y convirtió en cuna del vuelo libre: el cerro Bototillo.
Este triunfo no solo celebra la precisión y estrategia de un gran deportista, sino también una vida entera dedicada a enseñar, inspirar y mantener viva la pasión por volar en Ecuador.
Historia del cerro Bototillo: de cerro a cuna del vuelo libre en Guayaquil
Hace más de una década, cuando volar en Guayaquil parecía imposible, Raúl Guerra vio algo que otros no: una montaña con alma de pista.
Mientras muchos la veían como un cerro, él descubrió una pista natural, una térmica generosa, un horizonte abierto y un viento noble que lo acompañaría siempre.
Con esfuerzo propio, construyó una zona de despegue, impulsó su mantenimiento y hoy disfrutan del vuelo libre en uno de los mejores lugares para entrenar.
Gracias a él, Bototillo pasó de ser tierra olvidada a convertirse en el corazón del parapente guayaquileño.
Sin embargo, el crecimiento urbano y la pérdida de zonas de aterrizaje amenazan su continuidad. Raúl lo sabe y lo dice con claridad:
“Los días de este lugar están contados, pero no es un adiós. Quiero invitar a todos a seguir volando en Bototillo mientras podamos.
Este cerro aún tiene mucho por dar. Y vale la pena defenderlo.”
Campeonato Nacional de Parapente FAI 2 – Ecuador 2025
El Campeonato Nacional de Parapente Cross Country FAI 2 – Ecuador 2025 reunió a más de 26 pilotos de todo el país en una competencia intensa que exigió técnica, resistencia y lectura precisa de las condiciones climáticas.
Durante una semana completa, los pilotos despegaron desde Bototillo enfrentando térmicas potentes, vientos cambiantes y decisiones tácticas al límite.
Pero fue Guerra, el más veterano de todos, quien sacó ventaja con experiencia, paciencia y una conexión profunda con su cerro.
Al recibir el trofeo, Raúl no lo podía creer. Después de años compitiendo, volando y soñando con este momento, por fin el título nacional era suyo.
“Este campeonato se lo dedico a mi nieto. Pensé en él en cada vuelo, y me dio la fuerza para no rendirme. Este trofeo es suyo.”
Homenaje a los pioneros del vuelo libre en Ecuador
El momento más emotivo del cierre llegó cuando Raúl agradecio a su mentor, el piloto ecuatoriano Titos Morán.
“Gracias, sensei Titos. Tú me enseñaste a volar, a soñar, a creer. Este triunfo también te pertenece.”
Este gesto resumió la esencia del vuelo libre ecuatoriano: una comunidad unida por el aire, el respeto y la gratitud hacia quienes abrieron las alas primero.
Más que campeón: un símbolo del vuelo en Guayaquil
Raúl Guerra no solo es campeón nacional. Es el rostro del parapente en Guayaquil, un referente que ha representado al país en competencias internacionales y que mantiene viva la llama del vuelo libre semana a semana.
Su historia es la de un hombre que transformó una colina en escuela, un sueño en comunidad y el viento en hogar.
Y ahora puede decirlo con orgullo: es campeón nacional en su propia casa.